El sabor, el aroma y los efectos de un cogollo bien guardado son incomparables. ¿Te sorprenderías si te contáramos que estas tres características están directamente relacionadas a la humedad de tu planta? Si no guardas bien tus flores para que éstas mantengan la humedad adecuada, puedes perder gran parte de su sabor, aroma e incluso y más aún, puedes estar perdiendo la potencia de sus efectos.
A continuación te contamos todo sobre Boveda, una herramienta económica que mantendrá tus cogollos con las perfectas condiciones de humedad para así aprovechar al máximo cada una de sus características inigualables.
Para la flor de cannabis, el rango ideal de humedad relativa (RH) es del 58% al 62%. Mantener este ambiente estable protege contra el daño de los tricomas (diminutos pelos vegetales que se encargan de absorber el agua, regular la temperatura, percepción de estímulos entre otros), la pérdida de terpenos (compuestos aromáticos responsables de los distintos sabores y aromas, y de las propiedades terapéuticas), el secado excesivo y el moho.
Las bolsas de Boveda poseen escudos de terpenos que protegen los tricomas de los daños, garantizando que tanto los terpenos y los cannabinoides permanezcan exactamente donde deben estar hasta que llegue el momento de moler y fumar.
Ya sea medicinal o recreativo, Boveda protege tu hierba de manera rápida y eficiente con dos opciones diferentes de humedad relativa: 58% si vives en ambientes húmedos, y 62% para climas cálidos y áridos. Uses uno u otro, la tecnología de Boveda permite calcular cuál es el nivel de humedad que tiene tu hierba y entregarle o quitarle ésta para mantener tus flores con el porcentaje exacto de humedad relativa que necesitan para estar en su perfecto estado.
Utilizar estos escudos de terpenos es muy fácil, sólo debes meter una de las bolsitas dentro del frasco o recipiente donde están tus cogollos ya relativamente secados y ya está. Boveda durará entre 1 o 2 meses si está en un frasco que abras todos los días, o casi 1 año en un recipiente que no se abra casi nunca. Lo importante es cambiarlo cuando ya está duro.